EL DOLOR SE HIZO
CARNE
Es éste un Libro de
dolores contenidos
en el que cada poema tiene un destinatario concreto
y un pequeño desgarro en la piel de la Autora.
POEMAS
Y
el dolor se hizo carne
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Dedicado a la Escritora Mª Ángeles Cantalapiedra
...que,
durante unas horas,
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YO TENGO UNA CANCIÓN PARA TUS OJOS
Gaviola 12.6.2005
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A mi Hombre: Que intenta apresar lunas...
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Antes
de amanecer… Gaviola |
A un olvido...
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Acrobacias
de héroes en tránsito. Los
soldados saciaban su deseo Iras
que ningún llanto fecundaba. Sobre
un jergón sitiado de laureles Gaviola 28.6.2005 |
A una espera...
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...Y
una caverna oscura, Las
fauces de una ausencia penetrante El
tic... tac... de la cólera Entre
los ojos Gaviola |
A la inefable eEscritora Luciana Garcés...
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Nana, apenas, de tristes sueños Antes
de que tus versos fueran trigo maduro Espigas Crisantemos
segados al caer de la tarde, Fue tan penoso amarte sin saber que te amaba. Gaviola |
A
un tiempo perdido
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Tan
áspero dolor Oscuro
bebedizo de la ausencia Según
se iba la tarde de la vida Sólo escribía de ti, de nuestras cosas. Y
el crepúsculo Gaviola |
Al Tiempo ganado junto a ti...
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Yo,
que no soy del Mar, amo las olas Amo
la mano del segador de soles Naúfraga
del sudor de tierra adentro, En
algún archipiélago de olivos Gaviola |
A mi Tierra sedienta
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(OCASOS ENFRENTADOS) En
el ocaso,
Ya
vienen las Sirenas | | | >----------------->
Gaviola |
<-------------------De
otro fracaso ∞ <--------La
voz deshabitada
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Y
se fue el de los ojos Quizá
no era de noche, Y
se fue el de la boca Casi
pude lamerle Y
se fue con la tarde * quizá
morirse es sólo Irse sin marcar rumbo. Gaviola
25.7.2005 |
A Quiyo, mi perro negro... que
se fue allá, por Julio,
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Voy
a desanudar melancolías, Ya
está Agosto almacenando nieblas Rebuscaré
por todos mis papeles Este
verano ha sido casi tuyo: Ya
te vas. Te vas antes de tiempo. Te
acuso del jazmín y del perfume Este año se adelantó el invierno. Gaviola |
A Marila Que cortaba jazmines cada noche
Y luego...
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Te siguen recordando los jazmines En
Marineda Estás
entre las horas del ocaso A
veces un lamento, Entoces
reconozco tus ausencias Gaviola |
...luego
los contaba, uno a uno, para ensartar perfumes
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